Si yo te dijera que dentro de ti mora un ángel que se reviste de luz para hacer nuevos amigos.

Si yo te dijera  que dentro de ti existe  una paz infinita que  transforma todo en amigo y querido.

Si  yo te dijera que dentro de ti existe luz y que esa luz apaga la envidia, la discordia y la guerra.

Si yo te dijera  que dentro de ti existe un cupido que esparce amor y que flecha mi corazón.

Si yo te dijera que estás iluminado(a) por las estrellas y tus ojos parecen reflejo de esa luz.

Si yo te dijera que Tú estás divinamente concebido(a) y tienes dentro de ti todo lo que necesitas para vivir.

Si yo te dijera que dentro de ti existe una fiera que sabe luchar y defender a los suyos.

Si yo te dijera que dentro de ti habita una llama que es capaz de incendiar una ciudad.

Si yo te dijera que dentro de ti mora un inventor(a) capaz de crear mil  maneras de hacer la misma cosa.

Si yo te dijera que dentro de ti existe un constructor(a) que es capaz de crear nuevos caminos.

Si yo te dijera que dentro de ti existe un hilo de corriente que te une a lo sobrenatural tan fácilmente.

 

Y si yo dijera que hay un Dios, y que posee la llave de la vida eterna, da alegría que no acaba, da sueños que se realizan, da salud que se perpetua, da amigos que  nunca te abandonan, da nostalgia del deseo que se realiza, y te ofrece la  vida en abundancia.

Tú eres tu  propia luz, acéptalo y brilla, por amor a ti y a quien te creó. Construye, vive, conquista. No aceptes las derrotas y los «no”. Lo imposible es apenas una fuerza invitándote a realizar. Créelo: dentro de ti existe un universo en permanente construcción.